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La Criminalística es una disciplina que tiene una historia fascinante y ha contribuido significativamente a la justicia penal. A lo largo de los años, ha experimentado diversas etapas y ha evolucionado para convertirse en una ciencia capaz de reconstruir hechos delictivos, investigar conductas antisociales, adquirir evidencia y proporcionar atención a las víctimas, mejorando así la seguridad en nuestra sociedad.
Un poco de historia.
Para comprender el origen de la Criminalística, es importante mencionar algunas de las disciplinas precursoras que sentaron las bases para su desarrollo. Una de ellas es la dactiloscopia, que fue utilizada por primera vez con fines prácticos de investigación en negocios y empresas legales por los chinos alrededor del año 650 DC. Posteriormente, en 1575, nació la medicina legal de la mano de Ambrosio Pare, seguida por Paolo Zacchias en 1651. Incluso en la antigüedad, personajes ilustres como Imhotep e Hipócrates practicaron algunas subespecialidades de la medicina legal, y este último es considerado el padre de la medicina occidental.
A medida que avanzaba el tiempo, se realizaron importantes estudios que sentaron las bases de la Criminalística moderna. En 1686, Marcelo Malpighi llevó a cabo investigaciones sobre las huellas dactilares y los relieves que sobresalen en ellas. En 1783, el Doctor Bocher comenzó a estudiar la balística como una técnica de aplicación legal, dando origen a la disciplina que conocemos como Balística Forense. En 1844, el italiano Orfila realizó investigaciones en toxicología, que resultó ser vital para analizar la aparición de venenos en casos delictivos y fue otro paso importante en el desarrollo de la Criminalística.
En 1882, Alfonso Berbillon estableció en París la oficina de identificación judicial, donde implementó su método de identificación antropométrica. Esta disciplina, junto con otras ramas de la Criminalística, fue incorporada a la Criminalística General.
No se puede dejar de mencionar a Hans Gross, conocido como el padre de la Criminalística, quien hizo una contribución fundamental a esta disciplina. Gross logró unir los hechos, evidencias, instrumentos y herramientas proporcionadas por los personajes mencionados anteriormente, creando así una metodología para identificar a los delincuentes y comprender sus métodos de operación. La combinación de estos elementos permitió clasificar la información y sentó las bases para la investigación científica moderna del delito.
Disciplina que es capaz de resolver diferentes delitos.
El origen de la Criminalística ha sido un proceso que ha atravesado diversas etapas a lo largo de la historia. Hoy en día, esta disciplina es capaz de resolver diferentes delitos, desde reconstruir una escena del crimen hasta identificar al culpable. Sin embargo, para lograr todo esto, es necesario formarse profesionalmente con una Licenciatura en Criminalística, desarrollando habilidades como la atención al detalle, la capacidad de trabajo en equipo, la vocación de servicio y un enfoque científico.
Conoce más acerca de la Criminalística.
Si estás interesado en convertirte en un profesional de esta ciencia, te animamos a explorar más sobre la carrera y sus especialidades. La Criminalística continúa evolucionando y desempeñando un papel crucial en la búsqueda de la verdad y la justicia en nuestra sociedad.
Recuerda que el conocimiento y la formación son fundamentales para hacer frente a los desafíos en el ámbito de la justicia penal. Si te apasiona este campo y posees las cualidades necesarias, la Criminalística puede ser una opción fascinante para tu futuro profesional.